El judaísmo ortodoxo es una corriente del judaísmo que se caracteriza por seguir las tradiciones y las enseñanzas de la Torah (la Biblia judía) de manera estricta. Los ortodoxos practican el judaísmo de acuerdo con las leyes y las costumbres establecidas en la Halajá, la colección de leyes orales y escritas que rigen la vida judía.
El judaísmo ortodoxo de hoy es una comunidad diversa con varios subgrupos, como los ultraortodoxos (también conocidos como charedim), los modernos ortodoxos y los conservadores ortodoxos. Los ultraortodoxos son los más tradicionales y seguidores estrictos de las leyes, mientras que los modernos ortodoxos y los conservadores ortodoxos tienden a ser más aperturistas y menos tradicionales en su práctica.
El judaísmo ortodoxo sigue siendo muy popular en Israel y en las comunidades judías de todo el mundo. Los ortodoxos se esfuerzan por vivir una vida judía tradicional y cumplir con las leyes y las costumbres judías, como la observancia de los días de ayuno y las festividades, el cumplimiento de las leyes alimentarias kosher, y el estudio de la Torah y de la Halajá.
A continuación, vamos a repasar cuáles son las claves de la religión judía ortodoxa: sus principios morales, tradiciones y festividades principales.
Leyes escritas: la Torá
La Torá es la ‘sustancia’ de la revelación divina a Israel, el pueblo judío: la enseñanza o guía revelada por Dios para la humanidad. La Torá hace referencia a los primeros cinco libros de la Biblia hebrea (el Antiguo Testamento o el Pentateuco, en el cristianismo). Estos son los libros tradicionalmente atribuidos a Moisés, el receptor de la revelación original de Dios en el Monte Sinaí. Su orden es el siguiente: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. La Torá escrita se conserva en todas las sinagogas judías en rollos de pergamino escritos a mano que residen dentro del arca de la Ley. Las lecturas de la Torá forman una parte importante de las ceremonias litúrgicas judías. El término Torá se usa para designar, en general, a toda la tradición escrita de la ley hebrea.
Leyes orales: Mishná y Talmud
La Mishná (en hebreo, estudio repetido), o en plural Mishnayot, es la colección y codificación postbíblica autorizada más antigua de las leyes orales judías, recopilada por numerosos eruditos, llamados tannaim, durante un período de aproximadamente dos siglos. La codificación recibió su forma final a principios del siglo III d.C. por parte de Judah ha-Nasi. La Mishna complementa las leyes escritas o escriturales que se encuentran en el Pentateuco. El estudio intensivo de la Mishná por los estudiosos posteriores en Palestina y Babilonia dio como resultado dos colecciones de interpretaciones y anotaciones de la misma llamada Talmud.
La Mishná comprende varias secciones: el Nashim (mujeres), que explica las leyes religiosas sobre los esposos, el matrimonio, el divorcio, las actas de divorcio y ciertos votos que afectan la vida matrimonial. El Neziqin (daños), que abarcan el derecho civil y penal en relación con daños, robo, relaciones laborales, usura, bienes raíces, sociedades, relaciones con inquilinos, herencia, composición del tribunal, jurisdicción y testimonio, decisiones erróneas del Sanedrín (tribunal superior) y castigos físicos, incluida la muerte. El Qodashim (cosas santas), que proporciona una descripción detallada del complejo del Templo de Jerusalén y analiza las leyes que regulan los sacrificios del Templo, otras ofrendas y donaciones.
Y, por último, el Ṭohorot (purificaciones), que proporciona información sobre objetos rituales y rituales de purificación.
Leyes dietéticas: Kashruth
Estas leyen prohíben el consumo de ciertos alimentos y requieren que otros alimentos se preparen de una manera específica. La mayoría de las recetas sobre kashruth se encuentran en el Levítico bíblico, Deuteronomio, Génesis y Éxodo. En general, los judíos pueden consumir solo aquellos peces que tienen aletas y escamas (no mariscos), y ciertas aves y mamíferos, que además deben ser sacrificados de acuerdo con un ritual que, si viola, hace que la carne sea ‘no apta’ para su uso. La comida ritualmente inadecuada, se llama terefah (prohibido), lo opuesto al kosher (apto o permitido). Debido a que no se puede comer sangre animal, la carne debe someterse a un proceso ritual de remojo previo y salado (meliḥa) para extraer cualquier sangre que pueda quedar dentro de la carne después de la matanza (shehitah). Además, se prohíbe la combinación de carne y productos lácteos, tanto en la alimentación como en la preparación. Esta restricción no solo prohíbe el consumo de estos dos tipos de alimentos en la misma comida, sino que también requiere que se utilicen distintos juegos de platos, cubiertos, utensilios y manteles para la carne y los productos lácteos durante el tiempo de preparación. Algunos alimentos son neutros y se pueden comer libremente con carne o leche. No hay restricciones al uso de verduras y frutas. Durante el festival de la Pascua (Pesaḥ), que trataremos en un apartado más adelante, las leyes dietéticas especiales excluyen el uso de levadura en el pan y otros productos horneados.
La sinagoga
La sinagoga es la casa de culto de la comunidad que sirve como lugar, no solo para los eventos litúrgicos, sino también para la asamblea y el estudio. Sus funciones tradicionales se reflejan en tres sinónimos hebreos para sinagoga: bet ha-tefilla (casa de oración), bet ha-kneset (casa de reunión) y bet ha-midrash (casa de estudio). El término sinagoga es de origen griego (synagein, ‘reunir’) y significa ‘lugar de reunión’. La palabra yiddish shul (del alemán schule, escuela) también se usa para referirse a la sinagoga, y en los tiempos modernos la palabra templo es común entre algunas congregaciones reformistas y conservadoras. En la imagen, la lámpara de siete cañones de oro, emblema judío nacional y religioso cerca de las puertas de Dung. Al fondo, la sinagoga Hurva por la noche en la Ciudad Vieja de Jerusalén, Israel.
Festividades: el Shabat
El sábado, Shabat hebreo, (de shavat, ‘cese’ o ‘desistir’), es un día de santidad y descanso observado por los judíos desde el atardecer del viernes hasta el anochecer del día siguiente. Esta festividad hace referencia a la división del tiempo en la historia bíblica de la creación. La santidad del sábado ha servido para unir a los judíos durante el largo curso de su historia y supone un feliz recordatorio de su perpetuo pacto con Dios: este proporcionó milagrosamente una doble porción de maná (pan del cielo) el viernes para que los israelitas no se vieran obligados a recoger comida en el sábado durante sus 40 años de vagar por el desierto.
Tradiciones durante el Shabat
En la sinagoga, una parte de la Torá se lee durante el servicio de la mañana, seguido del canto de la Hafṭara (una selección de los profetas). Los salmos también son parte de la liturgia del día. Durante el servicio del sábado por la mañana, un niño judío cuyo cumpleaños número 13 se celebra durante la semana anterior celebra habitualmente su Bar Mitzvah (edad adulta religiosa) y puede cantar el Hafṭara. En los hogares judíos, la mujer enciende velas blancas de sábado antes del atardecer del viernes por la noche y pronuncia una bendición. La comida sabática que sigue es precedida por el Kiddush (bendición de santificación). Un Qiddush abreviado se recita a la mañana siguiente antes del desayuno, que se toma después del servicio. Una bendición especial (Havdala), que enfatiza la idea de separación (entre el sábado y los días de semana, entre lo sagrado y lo profano, y entre la luz y la oscuridad), concluye el sábado.
El seder
El jefe de familia, generalmente un hombre con un vestido ritual blanco (kittel), comienza la ceremonia santificando la fiesta con una bendición (Kiddush) sobre una copa de vino. En total, se beben cuatro copas de vino. Después de que todos se hayan lavado las manos, el maestro del seder presenta verduras crudas (karpas) sumergidas en vinagre o agua salada a todos los participantes. Luego, una espina, símbolo del cordero pascual de la antigüedad, y un huevo duro, símbolo de la bondad amorosa de Dios o, según algunos, un triste recordatorio de la destrucción del Templo de Jerusalén.
La Pascua
La pascua es un día festivo que conmemora la liberación de los hebreos de la esclavitud en Egipto y la salvación del primogénito de los israelitas. Esta festividad marca el primer y más trascendental evento en la historia judía. La Pascua comienza el día 15 y termina el 21 de marzo o abril. La primera noche de la Pascua se celebra con una comida familiar especial llamada seder. En el seder se comen alimentos de importancia simbólica que conmemoran la liberación de los hebreos, y se realizan oraciones y recitaciones tradicionales. Aunque el festival de la Pascua está destinado a ser un gran regocijo, se deben observar estrictas leyes dietéticas y prohibiciones especiales restringen el trabajo al comienzo y al final de la celebración.
Janucá
Hanukkah (en hebreo: ‘dedicación’) o Janucá, también llamada Fiesta de la Dedicación, Festival de las Luces o Fiesta de los Macabeos, s un festival judío que comienza el 25 de Kislev (en diciembre, según el calendario gregoriano) y se celebra durante ocho días. Hanukkah reafirma los ideales del judaísmo y conmemora la rededicación del Segundo Templo de Jerusalén al encender velas cada día del festival. Aunque no se menciona en las Escrituras hebreas, Hanukkah es una de las celebraciones religiosas judías más populares.
Otras festividades judías
A lo largo del año religioso judío, tienen lugar varios días de reposo. Cuatro, entre el final del Shevat (quinto mes del año civil judío) y el primer día de Nisan (séptimo mes). Para cada uno de estos cuatro días de reposo también hay un canto sagrado (Hafṭara) distintivo. Además, también hay Shabat Bereshit (sábado del principio), cuando el ciclo anual de lecturas de la Torá se reinicia con Génesis 1; El Shabat Shira (canción del sábado), cuando se lee la canción triunfal de Moisés del Éxodo 15; y los dos días de reposo de ḥol ha-moʿed (días intermedios), que se ubican entre los días iniciales y finales de los festivales de Pascua y Sucot.